[Eriol T. Harlaown] Toei y el regreso de los clásicos: ¿Necesidad? ¿Clamor? ¿Pretexto?

“Si busco en mis recuerdos los que me han dejado un sabor duradero, si hago balance de las horas que han valido la pena, siempre me encuentro con aquellas que no me procuraron ninguna fortuna.” Antoine de Saint-Exupery

El anuncio del regreso de Dragon Ball a las series animadas luego de 18 años ha sido un hecho ampliamente comentado en todos lados, tanto que incluso, el diario electrónico El Mostrador, caracterizado por su perfil político, hizo un análisis al respecto tomando esto como punto de partida ta para luego a ampliar su visión a otras series que también dejaron una profunda huella dentro de la generación que hoy bordea los 30 años de edad. Algo que también puede considerarse como un tirón de orejas a las televisoras locales.

Y es que este hecho viene a consolidar algo que se ha venido anunciando desde el año 2012, año en que Toei Animation dio a conocer el regreso de Dragon Ball al ámbito del cine, además de una nueva animación para Sailor Moon, concretada a través de Sailor Moon Crystal. Si sumamos a ello el retorno de la primera generación de niños elegidos en Digimon Adventure Tri, próximo a estrenarse, tenemos algo que de a poco se ha dado en la industria animada en Japón: El retorno de los Clásicos, La vuelta de los viejos superhéroes.

Pero, ¿Por qué se está dando esta tendencia? ¿Puede haber detrás de esto un interés económico más allá de la búsqueda de la rememoración (o conmemoración) de una serie? ¿Es una respuesta a las últimas tendencias que se han dado en animación japonesa?


Un nuevo ciclo, una nueva historia

Desde el año 2012 que se ha venido especulando del retorno de las series más importantes de Toei Animation. Algo que nació por el anuncio del proyecto “Sailor Moon 20th Aniversary”, posteriormente consolidado en Sailor Moon Crystal) y del anuncio de una nueva película para la franquicia Dragon Ball Z (La Batalla de los Dioses). Desde ese momento, los esfuerzos económicos de la “Productora del Gato” se volcaron a ambas franquicias, dejando de lado otro tipo de proyectos nuevos.

Sumando el trabajo de Digimon Adventure Tri, el cual se anunció durante la semana su lanzamiento en formato cine y del trabajo en Saint Seiya: Soul of Gold, tenemos una máquina del tiempo actualizando la labor de la productora, algo que confirma el interés del consumidor nippon en animaciones de carácter clásico, visible en canales locales dedicados al género como Animax, el cual sigue emitiendo las series mencionadas. Desde luego, esta fiebre se ha extendido a todas las partes del mundo en donde se conocieron estas series con gran éxito, algo que desde luego ha dado mucho que comentar en nuestro continente y por supuesto a través de nuestro sitio. ¿Acaso existe un afán de nostalgia o es un fetiche por las viejas añoranzas animadas del pasado?

En todo caso la recepción de estas obras durante la década de los noventa fueron tan buenas que llegaron a marcar precedente en todo el mundo, además de consolidar a Toei Animation como líder en el rubro en el país del sol naciente, cosa que es comprobable con la gran cantidad de series que durante la década del setenta y del ochenta consolidaron a los robots como Mazinger Z y los melodramas como Candy Candy.

Pero, detrás de toda esta buena intención existen especulaciones bien justificadas respecto al propósito de estos renacimientos televisivos. Propósitos que despiertan cualquier tipo de suspicacias y que tienen como principal objetivo el obtener ganancias a partir del éxito de estas nuevas producciones.


Los números de Toei

Adentrémonos a la parte más decidora de todo esto: Los números… Las cifras. Aquello que nos permite  comprobar que toda esta estrategia de Toei Animation, más allá de cuan discutible haya sido su proceder dentro de sus franquicias nuevas en el área, vuelve a los clásicos para buscar una alternativa y volver a posicionarse dentro del mercado.

A continuación, veamos la evolución de las acciones de Toei en el último año:

Fuente: Bloomberg

Desde Junio de 2014 las acciones de Toei fueron experimentando un alza hasta mostrar un comportamiento estable entre dicho mes y noviembre (entre 2800 y 2900 yenes por acción) donde se termina dando un salto definitivo al alza con el mismo volumen de acciones transadas, llegando a superar en algunos casos los 3500 yenes por acción. Se puede ver también un aumento en el volumen de transacciones, coincidente con los picos altos del gráfico llegando incluso a transarse la acción de Toei en más de 4000 yenes. En ese momento la compañía aprovecho el buen momento de sus papeles para encontrar financiamiento a través de los inversores locales lo que se puede ver el al grafico de abajo donde se llegaron a transar casi 45000 acciones de la compañía por día.

Veamos: En Junio de 2014, existía expectación por dos proyectos importantes de la compañía, los que se tratarían del lanzamiento de “Sailor Moon Crystal” en Julio y el estreno en cines japoneses de la película “Saint Seiya: Leyend of Sanctuary”. Dos remakes de franquicias de renombre producidas por Toei en el pasado. Avanzando por octubre noviembre tenemos los eventos que desataron el rally (como se le conoce en jerga bursátil a una tendencia alcista en los papeles de una compañía), se tratan de los anuncios de Saint Seiya: Soul of Gold y Digimon Adventure Tri. Además, se daban a conocer con profundidad los detalles de la película Dragon Ball Z: Fukkatsu no F, la cual había sido anunciada en septiembre del año anterior. Incluyamos también que en ese mes se dieron a conocer las cifras de recaudación de la película dedicada a los guerreros de Atena. Todo lo posterior a esas fechas, es resultado de lo anterior…. Todo son cifras buenas.

Ahora, echemos una mirada a la situación bursátil de Toei en los últimos diez años:

Fuente: Bloomberg

Al parecer por más de tres años las cifras para Toei no fueron muy buenas, y eso que en 2009 se estrenó Dragon Ball Z Kai. En parte eso se puede explicar por la entonces “Crisis Económica de las Hipotecas Subprime” en Estados Unidos y que llevo a la baja a todos los mercados del mundo. Ese mal momento que vivió la compañía se ha caracterizado por una crisis de originalidad y la mala distribución de sus producciones en mercados como el Americano, y bien puede hablar por sí solo 4Kids y One Piece.

Pero, vemos un cambio con este horizonte más largo de tiempo y de análisis, y este cambio viene de a mediados y finales de 2012. Investigando esa fecha nos topamos con algo sorprendente (o no tanto): Se anunciaron los nuevos proyectos para Sailor Moon y Dragon Ball Z… y desde ese momento todo fue alza. Al final, podemos formular la pregunta subtitulo del siguiente apartado. 


¿Necesidad, Clamor o Pretexto?

Si me tuvieran que preguntar, el motivo de esto serían los motivos uno y tres. Y de ello pueden surgir otra buena cantidad de preguntas: ¿Era necesario para la economía de Toei seguir explotando sus obras más clásicas, claro, con el permiso de sus autores?

No podemos olvidar que la industria de la animación en Japón, en los últimos 20 años se ha vuelto mucho mas competitiva y en algunos casos, algunos estudios de menor envergadura han ganado terreno con una gran cantidad de producciones que han ido ganando éxito, tal es el caso de Pierrot con sus dos producciones más importantes en la década pasada: Naruto y Bleach.

Y es que Toei no ha realizado una buena labor en la década pasada: Algunas de sus series no han tenido el éxito esperado en todo el mundo como son el casos de Pretty Cure y Toriko los cuales en nuestro continente solo se ha conocido su exhibición por  ETC TV. Otras como One Piece, en nuestro continente han sido un fracaso tras la carnicería de 4Kids a la serie. Dragon Ball Kai también sufrió del mismo destino luego que se acusara a la producción de plagiar la banda sonora de la película Avatar de James Cameron y su mala gestión en nuestro continente al usar una versión censurada. Con todo esto podemos contestar las preguntas planteadas:

¿Necesidad? De Toei, sí... y mucha. Representa una oportunidad de dar vida a los trabajos realizados en el pasado y volverlos a explotar. Total las marcas DBZ, SM, SS y Digimon son prenda de garantía de éxito seguro y por supuesto, se les puede sacar el máximo provecho económico. Su situación hasta el 2011 no era de lo mejor.

¿Clamor Popular? No se sabe. Recordemos que todas las decisiones de las productoras de animación se toman de acuerdo a lo que dicta el mercado interno japonés. Las empresas japonesas de animación no actúan de igual forma como Disney, el cual se basa en el mercado internacional. Los japoneses piensan primero en su público y tal vez después piensan en el internacional de acuerdo al interés de las distribuidoras de contenido de los distintos continentes. Tal vez puede existir esa segmentación de públicos entre aquellos que gusten de las series de perfil más actual y los que gusten de los clásicos, pero al fin y al cabo, siempre se va a terminar primando el mercado japonés por sobre el internacional.

¿Pretexto? Un tal vez, tendiendo a un “si”. Y es que los pronósticos sobre ingresos para la compañía son más que jugosos: 30 mil millones de yenes en ingresos (!!!) finalizando el año fiscal 2014 – 2015, con resultados de utilidades de 3900 millones. O sea… sigamos con los clásicos!!!

No podemos estar en las mentes gerenciales de los ejecutivos de esta compañía pero de algo si estamos seguros. En un futuro tendremos nuevas novedades respecto de este mismo tema y que este loop continúe, aunque esto no vaya ser que termine siendo una burbuja que tarde o temprano termine explotando en la cara del gato que vemos como logo de esta corporación. Al menos sabemos que los fans de DBZ estarán más que contentos con Dragon Ball Super, los de Digimon mas que enojados por el formato de su esperada nueva historia y los de SM con la incertidumbre de una nueva temporada para SMC. Al menos Toei ya aseguró sus bolsillos (por ahora).

Nos vemos en otra ocasión.